Anuncio

04 septiembre 2006

Síndrome de intestino irritable

Los trastornos del aparato digestivo ocurren con mucha frecuencia; es común escuchar: me tome unos tragos anoche y amanecí con diarrea o tengo varios días sin ir al baño pero eso es todo el tiempo, ya me acostumbré, vivo constantemente con unos retorcijones de tripas, ya me dieron a tomar algo que le prestó a mi hermano y no dejó de hacer.

Generalmente nos automedicamos y nos desesperamos porque el cuadro no mejora, estamos tirando piedras con los ojos vendados. Los trastornos gastrointestinales son muy variados y de múltiples causas y uno de los más frecuentes es el que se conoce como Colon Irritable, término con el que particularmente no estoy de acuerdo, porque su sintomatología y los trastornos de la motilidad no se limitan exclusivamente al colon, abarca a todo el tracto gastrointestinal, por lo que prefiero utilizar un término más amplio: Síndrome de Intestino Irritable.

¿Qué es el síndrome de intestino irritable?

Como todo síndrome, es un conjunto de signos y síntomas, alteraciones crónicas que involucran a todo el tubo digestivo pero que sus manifestaciones más evidentes son a nivel del colon, con alta frecuencia en adultos y con predominancia en sexo femenino; afecta aproximadamente al 22% de la población y parece deberse principalmente a factores psicosociales e incluso a determinado perfil psicológico de personalidad con tendencia al estrés.

Si bien es cierto que todas las personas con diagnóstico de Intestino Irritable sufren o están sometidas a distintos niveles de estrés y/o a determinados alimentos, no todas las personas con estrés presentan esta enfermedad, por lo cual pareciera existir un intestino más susceptible a la acción del estrés y determinados alimentos que otros. El cuadro clínico del Intestino Irritable está formado por dolor abdominal, estreñimiento, diarrea o alternancia entre estreñimiento y diarrea, meteorismo o flatulencia por la gran producción de gases en el intestino que puede llevar a una distensión del abdomen, relacionado con el estrés, ansiedad, depresión. Sin que se demuestre una alteración anatómica o metabólica.

Causas

No hay una causa específica de este trastorno, se produce por la interacción de un conjunto de circunstancias, siendo las más importantes el estrés y determinados alimentos. La persona que sufre de Intestino Irritable, por lo general conoce que el consumo de ciertos alimentos empeora su cuadro, lo cual podría explicarse por una particular intolerancia en grado variable, siendo más frecuente al trigo, productos lácteos, café, cafeína, chocolates, alimentos ricos en grasas, refinados, frutas confitadas, sopas de sobre, alcohol y bebidas gaseosas.

El estrés puede afectar a cada persona de manera muy diferente, alguna con taquicardia, ansiedad, pánico, dolores de cuello y espalda, etc. Pero en las personas con intestino irritable pareciera ser que el intestino es el órgano de choque de las emociones debido a su mayor sensibilidad, respondiendo en forma exagerada a estímulos que a otras personas no les produciría ninguna alteración. No olvidemos que la motilidad intestinal está controlada por los nervios y las hormonas.

Sin embargo para el diagnóstico de Intestino Irritable se deben descartar todas las alteraciones morfológicas y metabólicas que pudieran estar causando los síntomas.

Consejos útiles si sufre de Intestino Irritable

Si ha tenido un diagnóstico médico de Intestino Irritable y presenta estreñimiento, diarrea leve o alternancias de estreñimiento y diarrea, debe aumentar el consumo de fibras mediante la ingesta de alimentos ricos en fibras y a los cuales no tengas intolerancia, como pan integral, frutas con piel, verduras, salvado o afrecho de trigo mezclado con líquidos o los alimentos; es importante que determine qué alimentos se relacionan con la aparición del cuadro, es aconsejable no masticar chicles, ni ingerir bebidas gaseosas ni alcohólicas porque pueden agravar los síntomas; debe elaborar una dieta baja en grasa, evitar las comidas copiosas, es preferible que coma menos pero con más frecuencia, comiendo despacio y masticando bien los alimentos. Aumente la ingesta de agua sobre todo si predomina el estreñimiento. Practique un régimen regular de ejercicios, trate en lo posible de manejar adecuadamente el estrés si le es imposible evitar las situaciones estresantes; practique ejercicios de relajación, la meditación y el yoga pueden serle útiles.

Carlos Basanta
Correo del Caroní

No hay comentarios: